Mi gato no usa el (nuevo) rascador ¿qué puedo hacer?

manos-de-gato-con-garras

 

Como con todo mueble nuevo, la mayoría de los gatos primero necesita un tiempo de descubrimiento.

  • Podemos hacerlo más atractivo fijando juguetes en el.
  • Poniendo un objeto usado por el gato, como un cojín, en el.
  • Incorporándolo en el ritual diario del juego.
  • Poner golosinas en las plataformas.
  • También podemos enseñarles para que sirve haciendo movimientos de rascar con nuestras manos.
  • Para atraer al gato podemos preparar el rascador con catnip o valeriana, aunque no funciona en caso de gatitos hasta los 6 meses y tampoco todos los gatos adultos reaccionan a esos olores. Para probar si nuestro gato es sensible a ellos podemos adquirir un juguete con catnip o valeriana y observar su reacción.

  • Puede ser útil rociarlo con Feliway. Son feromonas sintéticas, que imitan las feromonas naturales con los que un gato marca – frotando la cabeza- los objetos de su territorio si se siente a gusto y seguro.
  • Ceva ha sacado en 2017 en España un nuevo producto específico: Feliscratch (feromona sintética interdigital felina) en pipeta para atraer al gato a rascar (ver también Feromonas que hacen rascar).

 

Algunos gatos parecen no aceptar el (nuevo) rascador y siguen rascando en muebles, sofá o alfombras.
Esto puede deberse a varios factores:

 

  • Emplazamiento erróneo.

El rascador más caro y divertido puede ser ignorado por el gato si no le gusta su ubicación (ver Emplazamiento).
Podemos intentar coger el gato cada vez que rasca en el sitio 'equivocado' (sin decir palabra) y levarlo a dónde sí debe rascar. Si esto no surta efecto no queda otra que buscar un sitio de mayor aceptación por parte del 'usuario' gato.


Pero cuidado: Los gatos son muy inteligentes y aprenden que rascando en 'sitios prohibidos' les garantiza la atención de sus humanos,  por lo que no debemos regañarles para no reforzar este comportamiento.

 

  • Tamaño no idóneo.

El rascador no ofrece la posibilidad de rascar en una posición estirazada de pie.

 

  • Olor del rascador

Los gatos son muy sensibles a los olores, lo que puede provocar que rechacen un mueble o el rascador.
De todas formas si el rascador incluso desprende olores desagradables para nosotros como se ha podido leer hace un tiempo en algunos foros, lo más probable está fabricado en algún país asiático y tratado con productos tóxicos, y por lo tanto no apto para nuestro gato y nuestra vivienda.

 

 

Si con todo esto nuestro gato sigue arañando los muebles asiduamente, también puede tratarse de un problema de estrés, p.ej. por problemas de espacio o convivencia de varios gatos, que requiere ayuda profesional.